Comprando emociones

Es o no una bonita iniciativa?  Son solo artimañas publicitarias?, o formulas licitas de ventas?... cada quien  juzgue.

Una campaña de una tienda en Chile, despertó distintas opiniones, en un grupo de mujeres tejedoras, algunas que ven a sus madres y abuelas tejer o son principiantes en este arte, alabaron el proyecto; que tiene como misión hacer una labor social.

La idea fue reunir a 5 agrupaciones de tejidos, de 5 regiones de Chile, 215 mujeres en total, desde distintas localidades de Tirua, Punta Arenas, de Chiloé, por nombrar algunas. y un artesano en madera. Todas son mujeres hilanderas, y esforzadas, muchas de ellas viudas.

 El objetivo innovador de esta tienda de retail es vender un pack de 3 ovillos de lana merino, con tinturas biodegradables, y palillos de alerce. Además de una colección de chalecos tejidos a mano, con lanas naturales. Según dicen este proyecto busca redefinir la relación entre el retail y la artesanía local de nuestro país. Reconocen las habilidades de artesanas textileras que mantienen viva la tradición de hilar y tejer.

 

Muestran al consumidor de retail el proceso laargo en la producción de la lana, desde el esquilado, lavado... todo comienza con el vellón y su hilado. Y exponen en un enternecedor video, como mujeres con manos trabajadoras, acarician el vellón, para convertirla en ovillos de lana.

Invitan a las personas a que sean una conexión entre estas artesanas y las grandes ciudades, ellos son el puente entre el trabajo que realizan estas agrupaciones de tejedoras y el consumidor para que elabore sus propias prendas, enseñan en tutoriales muy bien realizados para el aprendiz. 

 

Todo parece color de rosa hasta ahí. y se acaba la agradable música, y cambia a un tono más furioso para mostrar la otra cara de la moneda porque, intuitivas, lúcidas y expertas tejedoras se dieron cuenta del marketing emocional, respiraron para sacar la voz. Muchas alegaron y pusieron en antecedentes el sistema esclavizante que tienen como empresa para tratar a sus trabajadores, con largas y extenuantes jornadas laborales, que no dejan tiempo a la vida familiar y bajos sueldos, (el famoso horario de mall) y añaden que se aprovechan de estas ingenuas mujeres sureñas. Alegan también que el retail en sí aplasta todo emprendimiento individual o familiar. y que esta publicidad es una burla a las personas que se dedican a este rubro del tejido. Pues señalan que hay lugares y personas artesanas que venden a un precio mucho más bajo el pack, ya que este supera el valor más de un 300% . Entonces ponen en tela de juicio, que se les remunere lo que es digno a cada trabajadora. Por tanto está lejos de ser un proyecto social como ellos lo difundieron en los medios. Piensan que es un sistema feudal, en que sus siervos son los empleados. Empresas que se enriquecen a costa de ingenuas personas.

Ellas alzaron la voz en la página de la tienda e invitaron a que los proveedores de su materia prima, sean artesanas directas y no intermediarios como las empresas de retail. Porque de esa manera el dinero les llegaría de manera integra.

Hoy sabemos que el marketing emocional es una fórmula que funciona, y la tendencia de muchas empresas va por este camino, porque necesitan llegar al cliente de una forma diferente.

Saben que la compra es una acción que es resultado de una emoción, si el impacto publicitario genera una emoción en un potencial cliente, este impacto precipitará su decisión de compra. La publicidad emocional apunta a nuestro corazón y no a nuestro cerebro; porque busca crear un vínculo emocional con sus consumidores y lograr fidelizarlos, ya que, los mercados son cada vez más exigentes, y la competencia más agresiva.

Entonces con este tipo de campañas que apelan a los sentimientos de los consumidores explicado desde el punto de vista neurológico se entiende que el mensaje queda en la memoria a largo plazo. Las marcas se alejan del glamuor y del éxito con el que siempre nos han vendido sueños. Ahora crean mensajes más humanos y cercanos para que se efectúe la compra lo antes posible.

Sea como sea, las tejedoras con años de práctica en esta actividad. Están molestas; por que afirman que es un engaño y no una labor social y reclaman hasta el momento, sin grandes resultados... A causa de que ellos como empresa ya hicieron sus estudios tanto de mercado, sociológico, publicitario, y de más áreas. De modo que cuentan con las herramientas para manejar a las masas y que estas se encariñen con ellos.