Maria Eugenia, hace 5 años en el 27F quedó sin nada debido un ruidoso maremoto, que sumergió su ciudad y la dejó en cosa de pocas horas en una carpa arriba de un cerro. El mar devolvió poco y nada y Maria Eugenia se refugio en el silencio.
Señala que fue como un milagro, no tenían que comer, estaban sin zapatos y en pijamas, entonces apareció un auto blanco con donaciones, entre ellas un regalo que componía palillos, crochet, ovillos e hilos y una carta anónima. Ella nos sabe por qué esa donación se la entregaron a ella, que es tejedora y gracias a ese regalo, siguió arriba en un cerro, pero con un animo más favorable porque "tenía con tejer y entretenerse".
"Espero de todo corazón que este obsequio, pueda ayudarte a tejer sueños y esperanzas y así levantar el animo"- extracto de la carta anónima firmada por una mujer copiapina. Recuerda que por esos días llegó mucha ayuda a Dichato, pero este regalo marcó su vida. formó un taller con sus vecinas de su ciudad y la carta la guardó.
Luego de enterarse del diluvio en el Norte, su preocupación hizo que junto con una sobrina iniciaran una campaña en Facebook con el objeto de encontrar a esa mujer que sin muchas palabras, acrecentó la esperanza e inyectó animo para levantarse tras la tragedia.
"Puedes tejer y vender en el verano y ver que eres una micro empresaria. un abrazo con mucho cariño de estas lejanas tierras nortinas de una mujer copiapina" era como terminaba su carta y sin ningún otro dato, para encontrarla, lo único que sabe que podría ser de Tierra amarilla, no existe ninguna pista más. Cinco días de búsqueda a la distancia de más de 1300 kilómetros de distancia, usando como herramienta artículos de prensa y redes sociales, esperan encontrar el paradero de la mujer, para poder "devolverle la mano".
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| Este es el aviso que llegó a mi pagina de tejidos |
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